Fuente: @Angel Baroci
Por la mañana, la comunidad de Cannobio, en la región de Piamonte (ltalia), recibió con profundo pesar la noticia del fallecimiento del padre Matteo Balzano, sacerdote de 35 años, quien ejercía su ministerio pastoral especialmente entre los jóvenes del oratorio local.
📍 La Diócesis de Novara confirmó que se trató de un suicidio y pidió acompañar con la oración esta realidad tan compleja y dolorosa. El padre Matteo había sido ordenado en 2017 y había prestado servicio como vicario en la parroquia de Castelletto hasta el año 2023. Posteriormente, vivió un tiempo de discernimiento en el Santuario del Rey y, en los últimos meses, se integró a la comunidad de Cannobio, donde fue acogido con aprecio, especialmente por los jóvenes.
⛪️La alarma se encendió cuando no acudió a celebrar la Eucaristía matutina y no respondió a los mensajes ni Ilamadas. Su ausencia, inusual para un sacerdote tan comprometido y cercano, llevó a sus hermanos en la fe a buscarlo, encontrando una escena que ha conmovido profundamente a toda la diócesis.
🤍Quienes compartieron con él la misión pastoral lo recuerdan como un hombre lleno de entusiasmo, entrega y sensibilidad. En un comunicado oficial, el padre Franco Giudice, vicario episcopal para el clero, expresó con respeto y esperanza: «Sólo Dios, que conoce el corazón de cada uno, puede comprender los silencios y misterios más profundos del alma humana».
🕊Este acontecimiento trágico pone en evidencia una realidad que muchas veces permanece en la sombra: la fragilidad emocional que puede afectar también a quienes, desde el altar, acompañan, animan y sostienen a otros. El desgaste interior, la soledad o el peso de la responsabilidad pastoral no siempre se perciben desde fuera, pero pueden hacer mella en el alma.
🕯Pedimos a todos orar con fervor por los sacerdotes, especialmente por aquellos que atraviesan momentos de lucha interior. Encomendamos con confianza al padre Matteo a la Misericordia de Dios, que es más grande que todo sufrimiento y que siempre acoge, perdona y consuela.
Señor Jesús , tu que en el huerto de los Olivos sudaste sangre del miedo , porque sabías el dolor que te esperaba, que fuiste humano y conoces mejor que nadie cada corazón, cada tristeza, cada dolor te encomiendo , te ruego misericordia por esta alma . Abrazarlo señor como haces con cada uno de los sufrientes.